Jabón de arcilla roja

Tercer jabón con arcilla, esta vez, la roja.

Está formulado a partir de aceite de oliva, coco y manteca, y como aditivo en la traza, la arcilla roja y aromas de lavanda, limón, naranja y albahaca.
Este jabón puede utilizarse tanto corporal como para la higiene facial y es ideal para pieles maduras.
La base de oliva por sí sola hidrata, revitaliza, nutre, purifica y alisa la piel mientras mantiene el nivel óptimo de humedad, favoreciendo la regeneración celular.
El aceite de coco, agrega espuma y gran poder de limpieza, es ideal para complementar el aceite de oliva. Es antiacné, antioxidante y antiprurítica (picores), además de hidratante.
La arcilla roja* debe su color al hierro y aluminio, lo que le confiere propiedades astringentes, antiinflamatorias y descongestivas. Tiene además un gran poder absorbente y cicatrizante. 

Se recomienda su uso en pieles sensibles y delicadas, con problemas de dermatitis y celulitis. La arcilla roja está considerada como la más curativa ya que su uso promueve la regeneración celular de la piel.
Indicada así mismo en pieles con acné, para eliminar puntos negros y espinillas.

En cuanto a los aceites esenciales, la naranja* por su parte tiene efecto antidepresivo, antiinflamatorio, antiséptico, bactericida, sedante nervioso, digestivo, fungicida, hipotensor, estimulante digestivo y linfático, estomacal y tónico, además de resultar anticelulítico. La lavanda* posee efectos equilibrantes, cicatrizantes tonificantes y calmantes al mismo tiempo. Es antidepresivo y estimulante de las defensas del organismo. Por su acción antiséptica es apropiado para todo tipo de pieles, desde las juveniles, grasas, impuras o con acné, hasta las secas, maduras o con problemas específicos. La albahaca* tiene propiedades reafirmantes y es un buen tónico del sistema nervioso. El limón* resulta un excelente ingrediente en el cuidado de la piel,  ya que es antiséptico, astringente, curativo, depurativo y aclarante. Mejora la circulación sanguínea y linfática.

El sobreengrasado en traza es del 9%, así la hidratación está asegurada.
(*) Información extraída de la web del proveedor.

Crema antidolor

Pues... ya entrada en faena, no podía faltar en mi haber potinguero, una crema con funciones antiinflamatorias que ayude a calmar dolores articulares, lumbalgias, cervicales... causados por adoptar posturas incorrectas, malos gestos o achaques de la edad.

Quienes la han probado (entre ellos yo misma), están encantados con sus resultados.

También puede aplicarse dando un suave masaje, en pies doloridos, y brazos y piernas cansados.

Está formulada a partir de aceite de oliva, cera de abeja natural de opérculo (de las abejitas de mi querido Manuel) y aceite esencial de romero*, conocido como ya he dicho, por sus propiedades analgésicas, antimicrobianas, antioxidantes, antirreumáticas, antisépticas, antiespasmódicas, astringentes, carminativas, cicatrizantes, digestivas, diuréticas, fungicidas, hepáticas, parasitidas, reconstituyentes y tónicas, muy apropiado su uso contra varices, dermatitis, acné, eczema... y como repelente de insectos.
Como véis, queda sólida en un bloque, que podemos frotar sobre la piel o untar las manos para masajear posteriormente la zona dolorida.
Por mi experiencia y la de otros, aplicada y relajando la zona unos minutos, el efecto es inmediato.

Esta crema aguanta perfectamente 6 meses.

(*) Información extraída de la web del proveedor.

Bandeja para regalo

Aquí os dejo este pack regalo que me han encargado para un regalo.
En ella combino las manualidades (bandeja y cepillo) de mi otro blog "Alma de Trapo", con los jabones y bomba de baño de éste. A su destinataria le gustó mucho, y yo que me alegro!

Bálsamo labial oliva

Hay algo natural que mejor conserve la piel, y en este caso la fina de nuestros labios, que el aceite de oliva?
Pues con ella, y la cera natural de opérculo de las abejitas de mi querido Manuel (nunca olvidaré poner esta coletilla), he elaborado estos bálsamos labiales para tenerlos suaves e hidratados, ahora que llega el invierno.

Crema hidratante (Galeno)

La crema de Galeno data del s.II AC, y se la tribuye a un médico griego del que tomó su nombre.
Su ingrediente principal es la cera de abeja (yo he utilizado la de opérculo natural de las abejitas de mi querido amigo Manuel), mezclada con cualquier aceite, ya sea de oliva o como en este caso, de almendras.
También lleva agua y aceite esencial (ambas de lavanda).
Puede ser utilizada como crema hidratante y también como desmaquillante, aunque el primer uso lo desaconsejo para pieles grasas.
Aplicada en codos, rodillas y talones resecos notaremos resultados desde la primera aplicación.
Mi piel es más bien seca, y os puedo asegurar que desde que la utilizo, luce muy suave y luminosa, como si me hubiera maquillado.
Esta crema aguanta perfectamente 6 meses.